JUGUEMOS

Al final, lo último que queda

es la rabia.

Al final, el odio domina,

la opresión destruye

y seguimos impasibles,

comiéndonos la sangre por dentro.

Y seguimos

sin pausa,

hasta que le podemos echar la culpa a otros

de lo sembrado,

hasta que las guerras se ven como soluciones

y nos persigue el hambre.

Y seguimos

hasta que el juego

pierde la opción de pause. 

Un día perdemos también

la marcha atrás

y tenemos que jugar hasta acabar

con nosotros mismos.

ESTO... NO MERECE UN TÍTULO

Me pongo la camisa de ayer,
supongo que
porque guarda tu olor, 
el color de tus pestañas
o las heridas que nos hicimos en los labios.

Me enseñaste el crisol
que guardas en los bares
y en las costillas
cuando se te arquean
y el sexo de las estrellas,
el vicio,
la deshonra a los ojos de los cuervos,
el placer de los mil demonios que cruzan tu desnudez

Miedo

" Miedo"

Charol en las mejillas,

roto el cuerpo,

visto el infierno.

Le dio por cerrar la puerta,

por negar la sombra

y creer que era luz.

Lágrimas que corren, corrían 

y una copa de Lambrusco 

que debería cruzarle los labios,

no los puños al diablo.

El miedo, el puto miedo

a defraudar,

a traicionar al que te hunde

a tiempos lentos 

y golpes rápidos.

Reflejo de la sociedad, 

cruces entre los nudillos

para marcar,

para matar.

No es crítica, es realidad.

( )

De sabios

pasamos a poetas,

de poetas a rebeldes

y de rebeldes a personas

y así fuimos libres

hasta el momento en el que 

creamos los dioses,

los reyes, 

el odio.

Nos hicimos cazadores de presas.

Y entonces, pasamos a ser polvo.

Autor: I.Leiton

"Ying"

"Ying"

Agua negra

para vomitar los recuerdos

de mi yo par.

el jekyll de mis contradicciones.

Ying,

crisis de justicia ante

el asalto de la cera

de los labios de Yang

y manos que se entrecruzan,

que se enlazan.

Sexo,

lujuria,

pecado.

Me olvidé de ser el Ying.